4/02/2011
La tahona
Como ya comentamos anteriormente, nuestro Ayuntamiento destinará este dinero a la primera fase de la construcción de unas piscinas (¿Serán una, dos, tres fases...?). En un principio, recibirá poco menos de 30.000 euros, 5 millones de las antiguas pesetas, que no creo que den para terminar el proyecto... ¡¡¡Quizá algún año de éstos!!! No tenemos información de siguientes partidas, ni sus plazos.
En Alaraz, destinarán su dinero al mismo fin que nosotros.
Cantalapiedra también opta por enterrar el dinero en cemento, reacondicionando una de sus plazas. El Pedroso de la Armuña cerrará su Frontón con un presupuesto de 39.000 euros (más cemento), mientras que San Moral y Babilafuente renovaran sus redes de abastecimiento y saneamiento de aguas.
Todo ésto está muy bien para el siglo pasado, y en pueblos de otras características a las nuestras. Hoy la realidad es otra.
De entre todos los proyectos, y exceptuando los que son destinados a la mejora del alcantarillado y abastecimiento de aguas, el más coherente e inteligente es el de Palacios Rubios, que utilizará los 36.000 euros asignados en el cambio del alumbrado público. Con esta nueva partida quedarán desterradas para siempre las antiguas lámparas de vapor de mercurio
Una brillante idea que les supondrá un ahorro del 30% del gasto en electricidad. Una manera, además de ecológica, muy buena para recuperar la inversión; con lo que se ahorren en electricidad muy pronto recuperarán lo invertido y lo podrán aplicar en otras necesidades. Una medida de ahorro que, en vista de lo que está subiendo el precio del recibo, les vendrá "al dedillo".
Y es que, amigos, en tiempos como los que corren hay que buscar proyectos de este tipo, cada vez las ayudas a nuestros pueblos se irán reduciendo, sea por su despoblación, sea por crisis... En realidad lo que ocurre es un total desinterés de las administraciones por el medio rural.
Aunque es verdad que nos vendría muy bien una piscina, quizá no sea el mejor momento y tengo serias dudas de que en Tarazona se alquile "al estilo de Torrecilla".
Amortizar gastos de mantenimiento y recuperar la inversión, económicamente hablando (dejando de lado el bien social que sin duda es), no va a ser rentable.
No es menos cierto que un Ayuntamiento debe buscar, en la mayoría de los casos, el bien social, dejando de lado su rentabilidad si es necesario. Pero me temo que con la actual situación económica por la que atraviesan los vecinos de nuestro pueblo y sus arcas municipales no es ni mucho menos el caso.
Las inversiones de estas ayudas deben ir orientadas al ahorro, al empleo, a atraer y fijar población, al mantenimiento de las instalaciones y bienes ya realizados, a tratar de buscarle rentabilidad económica o social a las inversiones, paliando en algún modo, las distintas necesidades sociales que van cambiando con el paso del tiempo.
Todos los esfuerzos deben ir encaminados hacía el objetivo de conseguir empleo de una manera estable en nuestro pueblo (principal problema); si ésto no es impulsado desde nuestro Ayuntamiento dudo mucho que la inversión privada lo haga, y en pocos años nos toparemos con una realidad que hemos estado ignorando durante décadas.
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Nadie niega el beneficio social que nos aportaría una piscina.
ResponderEliminarEstá claro que cualquier servicio extra es bien recibido por todos, simplemente comentamos que existen necesidades para los vecinos que permanecen allí todo el año que se podrían paliar con este tipo de subvenciones.
Si que es posible que alguien la alquile, en otros pueblos se hace, mediante subasta pública, pero también tenemos ejemplos de pueblos como el nuestro en el que no son rentables y el Ayuntamiento invierte dinero para mantenerla.
Quizá en otro momento este proyecto hubiese sido aplaudido por nosotros, pero en la actual coyuntura económica este tipo de inversiones es totalmente prescindible.
Hay que optimizar los recursos, de nada sirve como dijimos cuando se construyó el salón, tener un gran edificio si no se utiliza, el tiempo nos está dando la razón bastaba con acondicionar el viejo.
Con la piscina pasará lo mismo, tendremos una piscina, lógicamente al aire libre, que se utilizará como mucho tres meses al año. Una inversión enorme en ocio para tan solo tres meses a lo sumo y con una afluencia de público presumiblemente escasa para lo que este tipo de servicios demanda. Recordemos que estas inversiones salen de 360 habitantes, de los cuales, lo utilizarán un 10% de los residentes tirando por lo alto, si le añadimos los gastos de mantenimiento ¿en serio que no os parece demasiado?